domingo, 28 de octubre de 2012

Las esperanzas se van yendo poco a poco, y tras sus pasos van dejando el amargo sabor de algo que no fue. Puedo sentir como la tristeza se apodera de mi al recordar cada una de las cosas que dijo, cada uno de sus abrazos, cada uno de los besos que me dio, bueno todo eso...
Ingenua fui al caer en sus palabritas y frases prefabricadas, ilusa fui al creer que significaba algo para el. Pero lo que mas bronca me da es haberle hecho saber que me importa. Eso es lo que mas me genera impotencia, el hecho de jugarme a todo o nada por una persona, animarme después de mucho tiempo, que no me importen ni siquiera las cicatrices que llevo por dentro; y que esa persona por miedo o mera indecisión me deje ir.
Miedo, yo también lo sentí. Lo siento cada vez que algo me importa de verdad, cuando no quiero perder algo bajo ninguna circunstancia, pero ese sentimiento no me impide ver las cosas como son, y a él lo esta dejando ciego. 
Me dijo que lo lastimaron muchas veces y que buscaba a alguien en quien confiar, pero acá estoy y no me ve. Estoy muriendo por ser su confidente, escuchar cada una de sus inquietudes, sacarle una sonrisa. Estoy muriendo por ser esa persona que tanto busca, y que él esa persona que yo tanto busco. Pero como dije antes, las esperanzas se están yendo, y esta vez es porque saben que merezco algo mejor.